Todos pensamos diferente, está de más decirlo. Y esto no solo ocurre entre países, en los cuales las culturas marcan un claro diferencial, sino que también se refiere al entorno más cercano en el que se desenvuelve cada uno: trabajo, estudios, familia, entre otros.
La asertividad se refiere a un modelo de comunicación que busca mantener la calma, respeto y empatía en todo momento, permitiendo que se expresen pensamientos de tal manera que se formen relaciones interpersonales de calidad.
Y es que todos, de alguna u otra manera, podemos pasar momentos de verdadero estrés cuando intercambiamos opiniones con otras personas, pero, a pesar de diferencias de criterio, podemos hallar esos puntos de encuentro.
Por eso te compartiremos 7 consejos para que desarrolles ese sentido de asertividad, tan necesario para cada ámbito de nuestra vida:
- Pide amablemente: no todo se puede lograr en base a amenazas. Una palabra atenta y respetuosa puede abrir muchísimos cerrojos, por tanto, aplica la amabilidad en todo momento, así crearás un ambiente de confianza.
- Sé empático: no es solo ponerse en el lugar de la otra persona, sino sentir de corazón lo que ella siente, de esa manera podemos conectar realmente y entendernos mejor.
- Aprende a negociar: no siempre se puede ganar, a veces es necesario ceder, como parte de una estrategia ganar-ganar. Es preciso entenderse mutuamente ambas partes y que cada una no sienta que está perdiendo, sino que está recibiendo algo beneficioso.
- No puedes responder sí a todo: cuando aceptamos absolutamente todo lo que viene, podemos sobrecargarnos de actividades, y más allá de quedar bien con la otra persona, quedaremos mal con nosotros mismos, al descuidar por completo nuestra salud emocional.
- Sé transparente y coherente: no es solo decir, sino hacer, por lo tanto, procura siempre, en todo momento, tener una postura de transparencia y honestidad con todo lo que te rodee, porque de esa manera crearás alianzas de confianza, que se traducirán en excelentes relaciones a largo plazo.
- Aprende de tus errores: ser asertivo también significa que no siempre podemos ganar, y, por lo tanto, de los “fracasos” o más bien, estaciones de la vida, podemos sacar muchas lecciones que nos ayuden a saber por dónde no tenemos ir y qué camino es mejor tomar.
- Brinda críticas constructivas: a veces suena como un cliché esa frase, pero lo cierto es que no se practica frecuentemente. Es muy fácil criticar el trabajo de otros, y jamás reconocer virtudes, pero muy difícil aceptar que los otros lo han hecho bien y que merecen una palmadita en la espalda, así que hoy puedes comenzar a practicar aquello y verás grandes diferencias.
Esperamos que estas recomendaciones hayan sido muy útiles para ti. Recuerda que siempre podemos dar un paso adelante y ser un poco mejores que ayer. Si antes fallamos, ¡no hay problema! Hoy podemos reivindicarnos y comenzar una mejor historia.
Si quieres leer más consejos, ¡aquí es tu lugar! Revisa nuestras notas anteriores, en las que te hablamos sobre 4 consejos para mejorar tu escritura, tips para dormir mejor y cómo ser más productivo en el trabajo.
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Escrito por Alex Morán Navia
